Termina el verano y con él la temporada de pileta. No obstante, el cuidado y mantenimiento de la piscina debe continuar todo el año, no tan arduo pero sí de manera regular para que, de esta forma, al siguiente verano todo esté en perfecta condiciones para su nuevo uso.
Para esto, es conveniente revisar el funcionamiento de todos los sistemas de la piscina, sobre todo el correspondiente al filtrado. Al mismo tiempo, para que el agua permanezca en buen estado, es necesario colocar una cantidad de cloro menor a la habitual y hacer funcionar el filtro durante un promedio de ocho horas a la semana.
Además, al menos una vez por mes se debe controlar el nivel de PH (valor de acidez del agua) cuya cantidad ideal es un 7% y recoger hojas y objetos que pueden pudrirse en el agua provocando su contaminación.
Para facilitar el cuidado de nuestra piscina, en el mercado existen diversos productos químicos que se aplican sólo dos veces al año, evitando la formación de plancton y algas. Combinándolos con cloro y alguicidas, permitirá que el agua se mantenga más limpia por mayor tiempo.
Asimismo, otra alternativa para preservar el agua de nuestra pileta es la colocación de una cubierta anclada a sus bordes laterales. Así, no será necesario el uso de productos químicos (sólo cloro) y no hará falta recoger hojas ni residuos, pues la funda cubre toda la superficie de la piscina, permitiendo una buena protección. No obstante, es recomendable levantar el cobertor de vez en cuando y chequear el estado del agua, para así evitar futuras sorpresas. En el mercado se comercializa una amplia gama de cubiertas para todo tipo de piletas, muy distintas en material, tamaño y forma de anclaje, por lo que seguro encontrará la suya.
Finalmente, luego de leer esta nota, no hay excusas para un buen mantenimiento y cuidado de su piscina. Manos a la obra!!
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