Una de las opciones más económicas a la hora de querer brindarle calidez a nuestro hogar, es el uso de velas. Con una gran variedad de formas, aromas, colores y tamaños, las velas son una simple alternativa decorativa que nunca pasa de moda.
Ideales para ambientes intimistas y románticos, la luz de las velas nos permite lograr una atmósfera acogedora, relajada y sutil, especiales a la hora de querer tranquilizarnos y descansar.
Asimsimo, las aromáticas permiten mantener nuestra vivienda perfumadas, evitando malos olores y la presencia de insectos, perfectas para el verano y para cuando en casa hay mascotas.
De diferentes tonos, algunas monocromáticas, otras combinadas; cada vela de color posee un significado determinado: las violetas transforman nuestra energía, liberando presiones y tensiones que nos ayudan a mejorar la salud; las azuladas estimulan nuestra capacidad de razonamiento, nos brindan tranquilidad permitiéndonos comprender mejor todo lo que nos rodea; las amarillas son ideales para colocarlas en lugares de trabajo y/o estudio pues estimulan la imaginación y concentración; las velas naranjas aportan vitalidad y fuerza; las rojas pasión, amor y valentía; las verdes son para la suerte y la autoestima; las negras contra la envidia, las blancas sirven para el bienestar en general y las rosadas para cuidar el romance, brindan estabilidad y paz a la pareja.
En la bañera, de centro de mesa, escondidas en algún rincón de nuestra casa, las velas son adecuadas para todas las habitaciones de nuestro hogar, incluso las de tipo flotantes para la piscina y los grandes fanales para el jardín.
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