El paso de los años, el roce diario y los fuertes golpes, inevitablemente deterioran la belleza propia del mármol. A continuación, Terrenos y Quintas te cuenta como eliminar manchas indeseadas y cuidar este material tan noble y delicado.
Manchas de grasa: utilizá pasta de talco y alcohol para poder eliminarlas. Primero, colocá la pasta sobre la mancha y dejala secar. Una vez completamente seca, fijate si la mancha desapareció, si no lo hizo, volvé a repetir la operación hasta que el talco la absorba definitivamente.
Manchas de hierro: mezclá jugo de limón con sal y aplicalos sobre la mancha. Dejalo actuar por unos minutos y luego remové la mezcla con algún trapo húmedo. Si la mancha sigue ahí, repetí la operación, pero teniendo siempre en cuenta de enjuagar luego bien la superficie.
Manchas amarillentas: colocá agua con vinagre y frotá fuertemente el lugar de la mancha con un paño que no haga pelusa. Inmediatamente, enjuagá el area restaurada.
Manchas difíciles: lo ideal es removerlas con alcohol de quemar. Si a la primera aplicación no salen, lo mejor es lijar la superficie, limpiar el polvillo, y volver a colcarles alcohol.
Suelos manchados: en un vaso, colocá 3/4 de agua oxigenada y 1/4 de agua, revolvé y aplicá la solución lograda en toda la superficie. Esperá unos minutos y posteriormente, con el secador, le pasás un trapo de piso bien húmedo, dos o tres veces.
Mármol blanco: utilizá cloro líquido suavizado en un poco de agua, ayudándote con un cepillo de fuertes cedras para frotarlo uniformemente. Después, se debe lavar muy bien la superficie, para no dejar restos de cloro.
Bachas y mesadas de mármol: no hay nada más lindo que limpia y reluciente cocina. Para sacarle brillo a nuestras mesadas o bachas de mármol, debemos distribuir un buen puñado de sal entrefina y fregar con un trapo mojado. Por último, enjuagar y secar bien con un paño suave.
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